La
muerte del actor Philip Seymour Hoffman se
viene a sumar a la de tantos artistas que acabaron en manos de sus adicciones.
El hecho de que fuera un gran actor con un brillante pasado y un aún más
prometedor futuro tiñe de luto el mundo del espectáculo.
Al
parecer ya jugueteaba con las drogas en su etapa universitaria, así que no le
venía de nuevo. Lo dejó radicalmente, según dicen, pero volvió a ello. ¿Por
qué? Algunas personas pueden opinar que va con la fama. Son personas que
aparentemente lo tienen todo pero que aún así son infelices. Tener prestigio,
una buena carrera, dinero, trabajo, no es suficiente para sentirte a gusto
contigo mismo. Cuántos casos como este han salido a la luz y la gente se queda
pasmada preguntándose por la necesidad de buscar una paz que no te dan todas
esas cosas.
COREY MONTEITH,
por ejemplo, que recién empezaba su
carrera cinematográfica, Su muerte fue muy llorada por los fans de la serie Glee.
El 13 de julio de 2013, el actor fue hallado muerto en la habitación de un
hotel en Vancouver, Canadá,
producto de una sobredosis de alcohol y heroína. ¿Le pudo la reciente fama?
HEATH LEDGER uno de los protagonistas en
Brokeback Mountain y por ser el último Jocker de Batman. En el 2008 Ledger
murió por una intoxicación aguda por los efectos combinados de la oxicodona,
hidrocodona, diazepam, temazepam, alprazolam y la doxilamina. ¿Estrés?
BRITTANY MURPHY
, esta actriz con habilidad para
la comedia y también para la sobreactuación, estaba haciendo su carrera en un
destacado lugar tras las grandes estrellas de su generación. Pero luego, su
excesiva delgadez y dependencia a los antipresivos provocó su fallecimiento en
2009, a causa de un cóctel de hidrocodona, paracetamol, metanfetamina y
clorfenamina. ¿Qué pretendía?
Y los ejemplos podrían seguir.
A mí todo ello me invita a la reflexión. ¿Qué es lo que
esperaban estas personas de la vida?¿Qué les faltaba? ¿No tenían amigos, amor,
éxito? ¿Qué les falla a las personas que se drogan para caer en tal desgracia?
La gente de la calle somos capaces de imaginar por qué un pobre se drogue para huir de una
realidad horrible, pero ¿un rico?
La clave pues, no está en lo que tienes sino en quién
eres. La huida hacia un mundo sin preocupaciones, alejarse del espacio que te
oprime no tiene que ver con la abundancia o la escasez de cosas, sino con tu
pobreza anímica. Si algo no te gusta debes cambiarlo, buscar soluciones.
Drogarse no es el camino, es un problema más. Te aleja de las personas que te
quieren bien, te endeuda, te destruye física y psíquicamente.
Todos estos casos y de otros que conocemos anónimos en
las cunetas, en las calles vacías, en camas de hospital sin identificar, deberían
servirnos de ejemplo de lo que nunca debe ser. Eso no es ser persona. Las personas
piensan, y lo hacen porque tienen esa racionalidad que supuestamente nos
distingue del resto de los seres vivos.
Las personas somos capaces de valorar, de darle importancia a
determinadas cosas y a otras no.
Ellos lo tenían todo, menos la capacidad para vivir con
entereza ante los placeres o las
precariedades de la vida. Ellos lo tenían todo menos el espíritu que hace falta
para apreciar el regalo más preciado.
Me gustaba mucho ese actor, en mi opinión, era extraordinariamente bueno, y me sorprendió y lamento su muerte.
ResponderEliminarDa qué pensar, efectivamente, que alguien que, aparentemente, lo tiene todo necesite algún tipo de droga. No sé si cabe un miligramo de paraíso en el infierno en el que desgraciadamente viven cientos de millones de personas; pero parece evidente que en muchos paraísos sí cabe el infierno. No sé... serán paradojas de la vida, pero me temo que se me acabará sin despejar esta incógnita. Y tantísimas más...
Buena noche y saludos.
Hace poco leí que Hollywood destruye y luego te lapida.
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