domingo, 12 de junio de 2011

ADIÓS A FISICA O QUÍMICA, POR FIN.

Por fin se termina la serie que tantos quebraderos de cabeza nos ha dado a padres y profesores. Recuerdo que ya hace años, recibimos en el instituto donde trabajaba una circular de Antena 3 en la cual se nos ofrecía la oportunidad de aportar “nuestro granito de arena” como asesores de una serie sobre institutos, adolescentes, etc. Podíamos contar anécdotas, cómo era el día a día... No sé al final quién acabó asesorando a los guionistas de la serie, o lo que hicieron con las sugerencias recibidas, pero desde un principio, los que empezamos a ver la serie por curiosidad, nos llevamos las manos a la cabeza.

En el instituto todos comentamos lo mismo: “eso no es un reflejo de la realidad. La que se nos viene encima.”

Vamos a ver, a lo largo de mi carrera como profesora he estado en muchos institutos y en muchosa lugares. Estoy en contacto día a día con adolescentes. Por tanto creo que puedo opinar al respecto y decir:

-que en todas partes hay profesores y profesoras que no tienen ganas de trabajar, profesores maleducados que utilizan el insulto y la amenzaza como arma, profesores que quieren ser colegas de sus alumnos -craso error-, profesores que babean cuando las adolescentes les ponen literalmente sus pechos en la cara o se sientan de espaldas con el tanga a la cintura y el pantalón a medio glúteo, profesores que no tienen interés, o que no tienen ni idea... Pero también hay grandes profesionales serios y preocupados.

-Que en todas partes hay alumnos y alumnas que no tienen ganas de trabajar, que van a clase por no ponerse a trabajar o porque les obligan, que te destrozan las clases con sus bromas de mal gusto y sus broncas, que te enseñan el dedo, que te cortan la manga, que se fuman sus porritos en el patio, que fuman en los lavabos, que no hacen ni dejan hacer, que te amenzan, que te pinchan las ruedas, que te rallan el coche... Pero los hay que tienen curiosidad por aprender y ganas de forjarse un mañana.

Pero precisamente porque “los malos” afortunadamente no llegan a ser la mayoría, todavía llaman la atención.

En la serie los profesores se enrollan con las alumnas que son menores pero consentidoras, las profesoras con los alumnos que van de lo mismo, los profesores entre ellos y se pasán el balón, alumnos de sexo, drogas y rock and roll, chicas que se quedan embarazadas, homosexuales que hacen de su relación un espectáculo...
Eso lo hay, pero que se dé todo al mismo tiempo en un mismo centro y tan pequeño como el que se nos presenta es para que Sanidad lo cierre y expediente a todo el profesorado.

Los jóvenes adolescentes que son la mayoría de los aficionados a esta serie, se toman lo que ven como ejemplo, y meten en el saco de la normalidad lo que no debería ser en ningún caso tomado por ello.

Perdonen si molesto, pero ya que hemos descubierto el gran efecto que tienen los medios sobre los jóvenes, ¿por qué no intentamos transmitir valores de amistad, sinceridad, solidaridad, estudio, organización, responsabilidad... y tantas cosas que nos hacen falta?

Los alumnos que recibimos son un resultado a medio gas entre lo que tienen en su casa, que a veces es un desentendimiento total por parte de los padres, y las influencias que reciben del exterior (amigos, televisión, internet...)

A los profesores a veces nos toca hacer verdadero “circo” para que se nos atienda, para que nos den la oportunidad de enseñarles, para que se interesen por nuestras asignaturas que además pensamos son importantes para su formación como personas.

Los profesores no debemos adoctrinar a los jóvenes, sino despertar su sentido crítico y darles una formación para que puedan, cuando se vean en el caso, tomar decisiones, expresar sus opiniones, pero con coherencia, “con fundamento”.

Nos toca muchas veces ser profesores, madres, padres, psicólogos, asistentes sociales, tutores... No, aquí hay que mojarse y si ellos son el futuro, tratar de que sean un buen futuro. Pero esto es tarea de todos. Es un compromiso global.

3 comentarios:

  1. No hubiera podido decirlo mejor, Pilar. Nunca llegué a ver física y química, así que no puedo opinar más que lo que oí decir a unos y otros. Sé que mis alumnos la veían y, además, estaban encantadas con ella. Yo nunca entendí que pudieran hacer una serie para jóvenes con esos componentes de los que tú hablas.
    Estoy contigo. De todo hay, pero para nada son las cosas como parece que las pintó la serie.
    ¿Has visto "La clase", película francesa de Laurent Cantet? Si tienes oportunidad, mírala. Yo sí me ví reflejada ahí en muchas escenas. Creo que el director clavó algunos de los aspectos de un instituto de barrio de gran ciudad, la problemática con las que se encuentran los alumnos y la problemática con la que nos encontramos los profesores.

    Tuvo unas críticas muy buenas, pero como casi todo el cine francés, es una película de minorías.

    No sé si te lo he dicho, pero me ha gustado mucho tu texto.

    Un beso.

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  2. Gracias Maitechu.
    Sí, he visto la película y me ha encantado. Es una gran película que muchos deberían ver. Yo te recomiendo otra, esta alemana, que supongo se ha hecho más famosa por la trama. Se llama "La ola": imprescindible.
    Un beso.

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  3. Pilar, acabo de ver "La ola". No me ha sido difícil encontrarla en Internet. Me ha impactado muchísimo, es escalofriante, como escalofriante es pensar que en este mundo existen todavía muchos líderes que mueven a las masas creando fanáticos, aprovechando su ignorancia, inmadurez y sus ansias de poder.

    Te agradezco enormemente la recomendación. Me llamó la atención cuando la estrenaron, pero nunca tuve la oportunidad de verla.

    Una película buenísima que lleva a la reflexión. Sin duda, la volveré a ver.
    Un beso.

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